miércoles, 1 de agosto de 2012

LA HISTORIA DE... LOS CALIPSO

Cristóbal, Merche, Salvador, Martín Moro, un joven Paco Ortega como oyente y Agustín.

Alberto Román Vílchez

Para hacer una historia de la música 'ligera' en Úbeda es preciso marcar un punto de partida, un momento que fije un antes y un después para no perdernos en conjuntos vocales o folklóricos. Ese comienzo yo lo he visto en la aparición de la guitarra eléctrica (o electroacústica aunque con métodos caseros y muy arcaicos) y en la amplificación del sonido. Con esta base nos trasladamos a 1958, año en el que comenzó el primer conjunto ubetense que utilizó guitarras amplificadas: Los Calipso.

Su origen fue una rondalla que poco a poco se convirtió en un grupo de 'corte moderno', el cual empezó sus actuaciones en un concurso de Radio Linares. Aunque tenían algunas nociones teóricas sobre música, tocaban de oído. Sus componentes eran Alaminos a la batería (primeramente estuvo Martín Moro), Merche como vocalista, Salvador Izquierdo al bajo, Agustín Martínez a la guitarra y Cristóbal Martínez también a las seis cuerdas.

Las guitarras que llevaban las 'electrificaron' ellos mismos. Y Antonio Ortega, que era técnico, les hizo los amplificadores. En cuanto a la música que hacían, iba acorde con las modas del momento. Se basaba, sobre todo, en rock y música de orquesta, en la mayoría de los casos versionando a grupos famosos. No obstante, de vez en cuando introducían en el repertorio algunos temas compuestos por ellos mismos.

En la época en la que existieron Los Calipso se organizaban actuaciones en ferias, bodas y festivales, y dado que esto ocasionaba bastantes ajetreos, los primeros componentes cambiaron en diversas ocasiones. Así, Luis Sierra pasó a ser vocalista y Juan Romero cogió la batería, introduciéndose a su vez Manuel Miras con los teclados. También en algún momento les acompañó Marcos al saxo.

Ya establecidos tocaron con Karina y Los Bravos en la caseta del Club Diana, que se encontraba en primera línea a la hora de organizar conciertos. Incluso llegaron a tener ofertas para grabar un disco, algo que, por problemas de trabajo y estiudios, se vieron obligados a rechazar.

El fin de Los Calipso llegó en el año 1970 y fue trágico. Viniendo hacia Úbeda de una actuación ofrecida en un club de Sevilla situado en la céntrica calle Sierpes, el día de Noche Vieja, un accidente de tráfico ocurrido a la salida de Córdoba acabó con la vida de dos de sus componentes. Después de esto, el resto decidió dejar la música, y con ella toda una década haciendo bailar a miles de personas.

Cristóbal Martínez, recientemente con Armonía.

No obstante, cabe señalar que tanto Cristóbal Martínez como Agustín Martínez, mucho tiempo después, han seguido vinculados en parte a la música para 'matar el gusanillo'. Hasta hace poco han formado el grupo o dúo Armonía, interpretando canciones melódicas de siempre, teniendo como vocalista a la nieta del primero. Daba gusto verles enfundarse sus guitarras eléctricas en cualquier evento que les requiería, más recientemente en una fiesta de mayores de feria y en un encuentro de encajeras.

NOTA: Casi todos estos datos han sido extraídos del trabajo que publiqué en la revista IBIVT allá por el año 1995 dentro de la serie de nueve capítulos titulada 'Historia de la Música Ligera en Úbeda' (en este caso capítulo I). A su vez, fueron obtenidos entonces mediante entrevistas con integrantes de la banda.

Agustín Martínez recientemente con Armonía.